¿Por qué son tan importantes los templos para los mormones?
Por Reinaldo Mendoza
Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, llamados inadvertidamente como mormones y a la institución eclesiástica que les reúne como La Iglesia Mormona, se reúnen cada domingo en espacios hermosamente diseñados y erigidos para aprender y procurar la santificación por medio de las ordenanzas sagradas, estos lugares son conocidos como capillas y las cuales son la forma moderna de las sinagogas de la antigüedad.
La Casa del Señor
Sin embargo, de manera especial los mormones disponen de tiempo para asistir a un lugar muy especial y el cual representa la grandeza de Dios y de Su santa obra en la tierra y es el Templo o Casa del Señor. Este espacio es muy respetado por los mormones o Santos de los Últimos Días, como prefieren ser llamados.
Ahora bien, ¿qué hace de este lugar, el Templo, un espacio tan digno de respeto y significante atención?. Los templos son los lugares donde estos cristianos devotos logran percibir la realidad espiritual con mayor énfasis y adquieren mayor luz y verdad.
Obra vicaria
Los templos mormones son los lugares donde se entrelazan las familias y se procura la unidad espiritual por tiempo y eternidad. La obra genealógica encuentra un sentido real y con una perspectiva netamente trascendental por medio del poder del sacerdocio, que es literalmente el poder de Dios otorgado a los hombres para actuar en Su nombre, a través de la obra vicaria y del sellamiento de familias.
En su discurso “¿Por qué tener templos?”, publicado en la revista Liahona, de octubre de 2010, el presidente Gordon B. Hinkley dijo: “¿Habrá algún hombre que verdaderamente ame a una mujer, o una mujer que verdaderamente ame a un hombre, que no desee con todo su corazón que su relación continúe más allá de la tumba? ¿Ha habido padres que al enterrar a un hijo no hayan anhelado recibir la seguridad de que éste volvería a pertenecerles en el más allá? ¿Puede alguien, que crea en la vida eterna, dudar de que Dios no concedería a Sus hijos e hijas el atributo más preciado de esta vida, que es el amor que halla su expresión más viva en las relaciones familiares? No. La razón exige que esas relaciones familiares continúen después de la muerte. El corazón humano las anhela y el Dios de los cielos ha revelado la manera de lograrlo. Las ordenanzas sagradas de la Casa del Señor proporcionan ese medio”.
¿Secreto o sagrado?
Muchas personas se preguntan y tratan de saber qué tipo de actividades se efectúan dentro de estos centros sagrados. Algunos consideran que los mormones guardan secretos en este sentido y por ello son muchas las elucubraciones e ideas falsas al respecto. Sin embargo, el silencio de los mormones con respecto a los asuntos del templo no se trata del hecho de ser un secreto, sino más bien del carácter sagrado que estos asuntos representan para cada uno de los Santos de los Últimos Días y para Dios mismo.
Los mormones saben que el Padre Celestial desea que cada uno de Sus hijos logre permanecer en unión por este tiempo y por la eternidad como familia. Dios Restauró Su Iglesia y con ello se instituyó las ordenanzas a efectuarse por medio del santo sacerdocio. Todos los hombres y mujeres que habitan la tierra pueden participar de estas bendiciones del Altísimo y Su templo.
Convenios sagrados
Cada vez que un Santo de los Últimos Días asiste a la Casa del Señor reafirma su compromiso con Dios de seguir el ejemplo que Nuestro Señor Jesucristo dejó durante Su ministerio terrenal y se acercan a esa perfección que ha sido ofrecida a quienes le sigan con fe y esperanza de vida eterna.
El templo es pues, el lugar donde las parejas hacen convenios sagrados que les permiten permanecer unidos y establecen un compromiso de amor capaz de perdurar en el tiempo y en la eternidad. En el templo se conjugan los deseos de Dios y los deseos de Sus hijos de ser una gran familia.
Más que un edificio
Los mormones aspiran ser coherederos con Jesucristo y por ello creen tal y como lo indica el Artículo de Fe número 13, que son un compendio de las creencias básicas de La Iglesia Restaurada, “…en ser honrados, verídicos, castos, benevolentes, virtuosos y en hacer el bien a todos los hombres; en verdad, podemos decir que seguimos la admonición de Pablo: Todo lo creemos, todo lo esperamos; hemos sufrido muchas cosas, y esperamos poder sufrir todas las cosas. Si hay algo virtuoso, o bello, o de buena reputación, o digno de alabanza, a esto aspiramos”.
El Templo es más que un hermoso edificio, detalladamente elaborado; es La Casa del Señor y está dispuesto para aquellos que estén dispuestos a seguir las verdades eternas de Jesucristo y así preparar su retorno a la presencia del Padre Celestial, no como un ser salvo sino también como una unidad familiar, cumpliéndose la promesa de que los hijos son la herencia de los padres.
Miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, donde sirve como Obispo del Barrio Unión, Estaca Los Sauces, Valencia-Venezuela. Periodista (Comunicador Social, mención Desarrollo Social), egresado de la Universidad Católica Cecilio Acosta en Venezuela. Magister en Teaching Higher Education, egresado de la Caribbean International University.