¿Te imaginas ser compañero de misión de tu hermano? La Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, Bonnie H. Cordon, no tiene que imaginarlo, ¡ella lo vivió!
Los padres de la hermana Cordon, Harold y Carol Hillam, comenzaron a presidir la Misión Portugal, Lisboa, en 1981.
Según un artículo de Ensign de 1990, su hija mayor, Linda, ya había recibido su llamamiento para la Misión Portugal, Lisboa.
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Ella se encontraba en el Centro de Capacitación Misional cuando sus padres recibieron su asignación para servir en la misma misión a la que fue llamada.
El presidente Hillam dijo: “Le envié un telegrama y lo firmé como ‘su presidente de misión’”.
Más adelante, Bonnie fue llamada, antes de graduarse de la escuela secundaria, a servir como misionera en Portugal, también bajo el liderazgo de sus padres.
Así, durante el último mes de la misión de su hermana, Bonnie fue asignada a servir como acompañante de Linda.
“Qué experiencia tan especial y memorable.
Cada una de nosotras tenía la placa con el nombre ‘hermana Hillam’.
Eso confundió a mucha gente, pero abrió muchas puertas.
La gente preguntaba: ‘¿Por qué tienen el mismo nombre?’ y, luego, hablábamos sobre las familias”, dijo la hermana Cordon.
La hermana Cordon tuvo una experiencia única relacionada con el momento en el que recibió su llamamiento misional.
Junto con el lema de los jóvenes de 2022 de Proverbios 3:5–6, los miembros de las presidencias generales de las Mujeres Jóvenes y los Hombres Jóvenes compartieron recientemente lo que significa para ellos “confiar en el Señor”.
La hermana Cordon expresó:
“Debido al llamamiento de mi padre como presidente de misión, recibí mi propio llamamiento para servir en una misión antes de la edad estándar para las hermanas misioneras.
Eso significaba que ingresaría al Centro de Capacitación Misional antes de graduarme de la escuela secundaria.
Para mí, no tenía sentido que me llamaran a servir en ese momento, pero recibí una fuerte confirmación del Espíritu para confiar en el Señor. Lo hice, y las cosas salieron de forma maravillosa.
Confiar en el Señor significa seguir avanzando incluso cuando el camino no está del todo claro”.
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Haley Lundberg y fue publicado en LDS Living con el título “Sister missionaries: Pres. Bonnie H. Cordon’s unusual mission, including an unexpected companion“.