Cómo perdí más de 90 kilos gracias a la Palabra de Sabiduría

Este es el caso de Sheri Farley, una mujer que logró bajar más 90 kilos al vivir la Palabra de Sabiduría y seguir el programa de 12 pasos para recuperarse de las adicciones de la Iglesia de Jesucristo.

Sheri ya había intentado distintos métodos para bajar de peso. Su médico le aconsejó una dieta baja en grasas y le recomendó el vegetarianismo. Sheri lo intentó con entusiasmo.

Sin embargo, aunque perdió algo de peso, todavía luchaba con los demonios de la adicción a la comida.

Cómo Sheri perdió 90 kilos confiando en el Señor

oración templo

Imagen: Shutteratock

Sheri quería estar saludable y perder el peso que la había atormentado toda su vida, pero parecía que no podía lograrlo. Ella recuerda:

“Sentí que estaba perdiendo la batalla… no había esperanza… Estaba demasiado lejos [de la meta]”.

Sheri se sintió “fuera de control como una alcohólica”. No obstante, este pensamiento le recordó que una amiga había perdido peso al asistir a un programa de 12 pasos para la adicción a la comida.

Ella hizo clic en algo y decidió unirse a un grupo de recuperación de las adicciones.

Después de su primera reunión, dijo:

“Sabía que estaba donde recibiría apoyo y estaría a salvo del tormento de la comida y mi peso”.

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Foto: Unsplash

La clave del programa de 12 pasos para recuperarse de las adicciones fue que Sheri reconociera que la adicción había hecho que su vida fuera ingobernable. Asimismo, reconoció que “hay Alguien que puede hacer por ti lo que tú no puedes hacer por ti mismo”.

Ella dijo:

“Me volví al Señor en oración y le pregunté qué quería que hiciera con mi comida”. 

El Señor la guio hacia la Palabra de Sabiduría y una dieta basada en vegetales. Además, le dio la fuerza para seguir adelante.

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Con la ayuda de la Palabra de Sabiduría y el Programa de recuperación de las adicciones de la Iglesia de 12 pasos, Sheri pudo perder más de 90 kilos en 2 años.

Ahora que la comida y el peso ya no la atormentan, ¡no tiene planes de volver a comer de otra manera!

Aún después de bajar de peso. Sheri siguió participando en una reunión semanal de recuperación de las adicciones de la Iglesia. Ella dijo:

“Traté de pelear la batalla [de la comida] sola, pero la expiación de Jesucristo hace posible que nunca más tenga que soportar esa lucha sin Él a mi lado”.

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Hace poco, le pedí a Sheri que me dijera qué efecto ha tenido este cambio de dieta en su vida. Esto es lo que ella me dijo:

“Cuando pesaba más de 130 kilos tenía apnea del sueño, presión arterial alta, prediabetes, fascitis plantar y osteítis. Después de perder peso, no tengo nada de eso. 

No más llevar un respirador conmigo cuando viajo, no más sillas de ruedas en los paseos, no más extensiones de cinturones de seguridad en los aviones (¡y no más oraciones para no tener que ir al baño en el avión!). 

Todo sucedió gradualmente a medida que bajaba de peso, pero al recordarlo pienso en todas las ‘sanciones’ de tener sobrepeso. 

No obstante, la mejor parte de mi nueva vida es la cercanía que siento con el Señor y guardar la Palabra de Sabiduría es parte de eso”.

No tenemos que luchar la batalla solos

Cortesía de Sheri Farley

Me encanta saber que “hay Alguien que puede hacer por ti lo que tú no puedes hacer por ti mismo”. No estamos destinados a hacer las cosas difíciles solos. De hecho, es imposible.

El objetivo de esta vida es aprender a confiar en Dios y en Su poder para hacer por nosotros lo que no podemos hacer por nosotros mismos. Este es el poder de la expiación.

Si la adicción a la comida nos ayuda a aprender esta lección de vida, ¡qué bendecidos somos por haberla experimentado!

Cortesía de Sheri Farley

Ya sea que hayas experimentado o no la adicción a la comida, te recomiendo encarecidamente el Programa de recuperación de las adicciones de la Iglesia.

Cuando pensamos en la adicción, pensamos en las drogas y el alcohol. Sin embargo, las adicciones vienen en muchas variedades y la adicción a la comida es una de las adicciones más comunes en la comunidad de la Iglesia.

Según mi estudio sobre la adicción a la comida, este no es un desafío que las personas generalmente puedan superar a través de la “fuerza de voluntad”. ¡Necesitamos el poder de Dios!

El apoyo de un programa de 12 pasos fue clave para el éxito de Sheri Farley y también puede ayudarte a ti, haz clic aquí.

Fuente: Meridian Magazine

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