“Esta será la decisión más importante de tu vida… elegir a la persona con la que te casarás. Cásate con la persona correcta en el momento correcto”. – Gordon B. Hinckley
Elegir a la persona con la que te casarás es una decisión muy importante, ya que con ella compartirás tu vida y la eternidad.
Escoge a alguien que te respete, empodere e inspire a cumplir tus sueños y sobre todo que te acerque a Dios.
Recientemente, en una entrevista de podcast, la hermana Astrid Tuminez, presidenta de la Universidad Utah Valley, habló sobre este tema y compartió su historia de amor.
Ella explicó por qué su decisión de casarse con Jeffrey Tolk fue una de las decisiones más importantes de su vida.
La persona que desea estar contigo conseguirá un medio, no excusas
La pareja se conoció en un baile de la Iglesia cerca del campus de Harvard, donde Tuminez estaba cursando una maestría gracias a una beca integral que recibió.
Jeffrey Tolk, que en ese tiempo era un estudiante universitario, dijo que quedó flechado la primera vez que vio a Astrid.
En un principio, no salieron en citas. Sin embargo, el verano siguiente, mientras Tuminez estaba trabajando en Europa y viviendo con los padres de un amigo en París, Tolk la llamó inesperadamente por teléfono.
“Yo estaba como, ‘¿Cómo conseguiste mi número de teléfono?’
Jeff trabajaba para el senador Al Gore y en ese entonces aún no se usaba Internet. Así que, fue a la Biblioteca del Congreso, encontró una guía telefónica de París y buscó el apellido de las personas con las que me estaba quedando.
Ese fue el momento en que decidí que iba a salir con él porque, si podía encontrarme en París el día de mi cumpleaños, entonces definitivamente era alguien con quien podía salir en citas”, dijo Tuminez.
El matrimonio es un trabajo en equipo
Al recordar su historia de amor, casi 35 años después de su matrimonio, Tuminez sabe que tomó la decisión correcta al casarse con Tolk.
“No creo que me hubiera ido tan bien sin Jeff. Cuando la gente me pregunta, ‘¿Cómo hiciste todo esto? ¿Cómo es que tuviste tres hijos y aun así llevas una vida profesional tan exigente? Siempre digo, sin dudarlo, que mi esposo es parte integral de ese éxito. Es un trabajo en equipo”, agregó.
El siguiente es un extracto de la entrevista de podcast de Tuminez. ¡Veamos!
Cásate con una persona que te empodere y anime a seguir tus sueños
Entrevistador:
Dijiste que una de las decisiones más importante de tu vida fue escoger al hombre con el que te casaste. Esto por la forma en que te empodera y alienta. Cuéntame un poco más sobre ello.
Astrid Tuminez:
Mi esposo es un pilar fundamental en mi vida.
Siempre les digo a mis hijos que la decisión más importante que tomarán es elegir a la persona con la que se casarán.
Esa decisión afecta tu acervo genético y todos los aspectos de tu vida.
Con respecto a eso, hubo algo que me llamó mucho la atención de Jeff.
Cuando estábamos saliendo en citas, él me dijo, “tú eres responsable de tu felicidad”.
Eso me sorprendió porque a mi generación le vendieron el mito de que cuando te casas, los cielos se abren y eres feliz para siempre, y pues eso es falso.
Así que tomé esa frase muy en serio y pensé: “Soy responsable de mi felicidad y navegaré por mi propia vida”.
Debido a ello, nos apoyamos mutuamente en nuestra educación y aspiraciones.
El secreto para tener un matrimonio y aún así alcanzar tus metas personales
Astrid Tuminez:
Hubo un tiempo en el que yo trabajaba en la Unión Soviética, era mi primer trabajo importante, y mi esposo, en Nueva York. Volvía cada seis semanas para verlo. Muchas personas no entendían lo que pasaba.
Ambos teníamos el compromiso de apoyar los sueños del otro y creo que ese es el secreto de nuestro matrimonio.
Siempre digo que un buen matrimonio es una larga conversación. Si no tienes nada más que decir y no te interesa el punto de vista de tu cónyuge, entonces el matrimonio comienza a tambalear. Al menos yo lo considero así.
Este tipo de apoyo y respeto mutuos por los sueños del otro ha sido muy importante en nuestro matrimonio. Nadie se siente más orgulloso de mis logros que mi esposo. Él ama lo que hago y yo amo lo que él hace.
Que mi esposo esté ahí animándome en mis logros es fundamental para mí.
Mi esposo también ha logrado grandes cosas en su carrera y es maravilloso que él sea mi compañero para criar a nuestros hijos.
Fuente: LDS Living
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