Pregunta
Cuando realmente te arrepientes de los pecados que cometiste y los vuelves a cometer, ¿todavía se consideran perdonados siempre y cuando te estés esforzando seriamente por cambiar para mejorar? Como una adicción. Tu mente sabe que no es lo que realmente quieres. Pero, tu cuerpo tiene deseos carnales. ¿La Santa Cena ayudará con esto mientras me siga esforzando por mejorar? Por favor, ayúdame a entender.
Summer
Respuesta
Querida Summer,
Gracias por tu carta. Dependiendo de qué tipo de adicción estés hablando, probablemente esta sea una pregunta para tu obispo. Recuerda que el obispo está ahí para ayudarte.
A veces, los miembros tienen la idea equivocada de que acudir a un obispo para arrepentirse es como acercarse al decano de una universidad, como si estuvieras en problemas y fueras a ser castigado.
Esa no es la función de un obispo, él está ahí para ayudarte, no para castigarte. Creo que el Señor nos dio obispos porque Él no puede estar físicamente ahí para ayudar a cada uno de nosotros. Pero, Él quiere asegurarse de que recibamos la ayuda que necesitamos.
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Recuerda también que debido a la Expiación, Cristo entiende por lo que estás pasando. Él entiende la batalla entre el deseo de mejorar y la adicción. Él entiende las necesidades físicas, emocionales y espirituales. Debido a la Expiación, Él puede ayudarte.
Además de la Expiación y los obispos, el Señor ha proporcionado otra herramienta para ayudar a las personas a luchar contra las adicciones, el programa de recuperación de las adicciones de la Iglesia. Tu obispo puede darte más información sobre las reuniones locales. Puedes leer más sobre el programa aquí.
Me encanta lo que el Élder Uchtdorf dijo sobre nuestras debilidades y el amor del Salvador:
Me maravillo al pensar que el Hijo de Dios condescendiera a salvarnos con lo imperfectos, impuros, propensos a errar y desagradecidos que somos. He procurado comprender la expiación del Salvador con mi mente finita y la única explicación que hallo es ésta: Dios nos ama profunda, perfecta y eternamente. No alcanzo siquiera a estimar “la anchura, y la longitud, y la profundidad y la altura… [del] amor de Cristo”.
El Señor te ama y entiende que las adicciones no se superan de un día para otro. Él conoce tu corazón y tus deseos de mejorar. Él estará contigo a lo largo de este proceso. Asegúrate de usar los recursos que te ha proporcionado, no debes hacer esto sola.
Fuente: Askgramps.org
