¿Por qué José Smith instituyó la práctica de la poligamia? ¿Lo hizo por un fin personal? Vamos a resolver esta interrogantes en este nuevo capítulo de Fe y Creencias.
¡Bien, un episodio sobre la poligamia!
Desde aproximadamente 1833 hasta su final oficial en 1890, algunos miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días practicaron la poligamia.
Un esposo tenía muchas esposas. Es un tema controversial y realmente NO voy a defenderlo mucho. La poligamia es injusta para las mujeres, no me agrada y cualquiera que lo practique en la actualidad es excomulgado de la Iglesia.
Ya no es algo que se practica, pero, ¿entonces por qué se practicó en un inicio? ¿Qué hacemos con esta parte no tan agradable de la historia? ¡Hablemos de ello!
La poligamia: ¿Una verdad o mentira?
En general, existen dos pensamientos extremos cuando se trata de reacciones sobre la poligamia.
En un extremo están las personas que piensan: “Sí, Dios le dio el mandamiento a José Smith de practicar la poligamia, y él la implementó de manera perfecta entre los Santos”.
En el otro lado nos dice, “José era un mentiroso y solo quería tener muchas mujeres”.
Personalmente, creo que Dios sí le dio aquel mandamiento; no creo que José tuviera malas intenciones, pero también creo que José cometió muchos errores en su intento por implementar el matrimonio plural.
Ahora, si bien hay muchas preguntas que no podemos responder, podemos echarle un vistazo a algunos datos y ver lo que sí podemos responder.
La poligamia: antecedentes
El primer dato es que Abraham, Jacob, David, Salomón y probablemente Moisés practicaron la poligamia.
¿Por qué permitió Dios que eso sucediera? No lo sé. Pero estos son GRANDES personajes del cristianismo. Y como mínimo, nos muestra un precedente de que Dios ha permitido que los profetas del pasado practicaran la poligamia.
Con frecuencia, los detractores cristianos se apresuran a condenar la práctica histórica de la poligamia de los Santos de los Últimos Días, mientras pasan por alto por completo su propia historia con la poligamia.
Una vez más, no estoy a favor de la poligamia, es una práctica desgarradora para nuestra susceptibilidad actual, pero la historia es la historia, y si es que eres cristiano, debes saber que la poligamia sí sucedió.
La poligamia: Época de José Smith
Pero incluso para la susceptibilidad de aquellos en la época de José Smith, la poligamia era una práctica desconcertante. Una de las primeras hermanas de la Iglesia, Mercy Rachel Fielding dijo:
“Cuando se me comunicó sobre este tema por primera vez, puso a prueba la base misma de todas mis antiguas tradiciones y, por ende, todos los sentimientos naturales de mi corazón surgieron en oposición a este principio”.
Mary Hales dijo:
“Los hermanos y hermanas eran tan reacios a la poligamia que [el tema] apenas se podía mencionar”.
Y esto también fue difícil para los hombres. Cuando Brigham Young se enteró de esto, dijo:
“…fue la primera vez en mi vida en que deseé la muerte, y tardé mucho tiempo en poder hacerme a la idea. Cuando asistía a un funeral, sentía envidia del cadáver y lamentaba no ser yo quien estuviera en el féretro”.
Las citas siguen y siguen.
Incluso José Smith, cuando un ángel le mandó que instituyera la práctica, se mostró reacio.
El ángel aparentemente tuvo que visitarlo tres veces, en la última ocasión con una espada desenvainada, amenazando su vida, para que José obedeciera.
E incluso entonces, parecía que José trató de evitar la práctica total de la poligamia. Una de las formas en las que parece haber cumplido con esto fue casándose con mujeres que ya tenían un esposo.
José Smith y el matrimonio plural
En la teología de los Santos de los Últimos Días creemos que una pareja se sella por este tiempo y por la eternidad.
A medida que la Iglesia primitiva se esforzaba por comprender este poder para sellar, José selló a mujeres a él por este tiempo y / o por la eternidad.
Algunos sellamientos fueron por este tiempo, o por esta vida solamente. Algunos fueron solo por la eternidad, es decir, matrimonios que entrarían en efecto después de esta vida. Y otros fueron por este tiempo y por la eternidad.
Cada mujer casada con la que contraía matrimonio se sellaba a él solo por la eternidad.
Cada una de ellas siguió viviendo con sus respectivos esposos, y no hay evidencia alguna que sugiriera que José estuvo íntimamente involucrado con alguna de ellas.
Si José hubiera sido un depravado sexual, no tendría ningún sentido contraer estos matrimonios distantes y que son solo por la eternidad. Me parece más una forma de “cumplir” el mandamiento de Dios mientras que a la vez le proporcionaba un alivio emocional a su primera esposa, Emma.
Un motivo detrás de muchos de los sellamientos de José fue probablemente la idea de crear una gran familia de Santos que se pudiera interconectar.
Ésta parece ser una de las razones por las que un hombre, Heber C. Kimball, quería que su hija de 14 años, Helen, se casara con José, y así fue, pero solo por unos 13 meses antes de que José fuera asesinado. Heber “tenía un gran deseo de estar conectado al profeta José”.
Por supuesto, la idea de una esposa de 14 años es comprensiblemente impactante para nosotros en el siglo XXI.
Era menos impactante en el siglo XIX, seguía siendo inusual, pero no tan inusual como algo como, ya saben, la poligamia.
Los investigadores, francamente, no saben si su matrimonio llegó a consumarse, aunque la evidencia sugiere que probablemente eso no sucedió.
Ella continuó viviendo en casa con sus padres.
El autor Brian Hales dice que “Helen escribió más sobre el matrimonio plural que cualquier otra autora del siglo XIX, defendiendo la práctica y a José Smith… En aquellas páginas, Helen nunca describió, ni una sola vez, haber estado a solas con el Profeta sin una acompañante”.
Un mandamiento, no una ventaja
Ahora, desde una perspectiva superflua, es fácil ignorar todo el tema de la poligamia y decir: “José solo quería tener muchas mujeres y punto”
Pero si realmente miramos la historia, la evidencia realmente no respalda esa suposición. José hizo todo lo posible para asegurarse de que la práctica no fuera impulsada por la lujuria.
Por ejemplo, John C. Bennett era alcalde de Nauvoo y miembro de la Iglesia, y con el tiempo José se enteró que Bennett estaba engañando y seduciendo a las mujeres de la ciudad. Si José hubiera estado buscando lo mismo que Bennet, él podría haber sido el cómplice perfecto. Sin embargo, José lo excomulgó.
Un autor escribió:
“De manera contraria a las creencias populares del siglo XIX en cuanto a la poligamia, el harén mormón, dominado por hombres lascivos con líbidos hiperactivos, era inexistente.
Aquella representación de lujuria ilimitada fue en gran parte creada por quienes llegaban a Salt Lake City estando más interesados en reforzar el interés de las personas de su pueblo natal que en retratar con precisión el matrimonio plural.
Representantes de los periódicos y figuras públicas han visitado la ciudad en masa en busca de titulares para su público en el este
El matrimonio plural mormón… demostró ser un estilo de vida bastante monótono en comparación con las historias imaginativas, llenas de sensacionalismo sobre la poligamia exigido por los medios de comunicación del este, hambrientos por el escándalo”.
En un podcast con la Dra. Valerie Hudson que estuve escuchando, se hizo una observación muy interesante. Ella dijo:
“… uno de los hermanos de José Smith … parecía muy deseoso de practicar la poligamia, por lo que su hermano, José, le prohibió practicarla, lo que me pareció realmente interesante.
Por lo tanto, aquellos hombres que no eran lo suficientemente puros de corazón para ver [aquel mandamiento] como una prueba, sino más bien como una ventaja, a ellos, no se les permitió practicarlo”.
Por qué se dio el mandamiento del matrimonio plural
La creencia de que José fue motivado por la lujuria va en contra de lo que muestra el registro histórico.
Pero todavía no hemos respondido a la pregunta del millón: ¿POR QUÉ se dio la poligamia?
Doctrina y Convenios 132, la revelación oficial sobre la poligamia, nos da algunas razones, por ejemplo:
1. Formaba parte de la restitución o “restauración de todas las cosas”. (Todavía no comprendo esto del todo)
2. Le brindaba a algunas mujeres la oportunidad de casarse en el templo cuando de otra manera no hubieran podido hacerlo. (Esta tiene un poco de sentido para mi)
3. También fue dada para “multiplicarse y henchir la tierra” (Esta tiene más sentido para mí que las demás)
El Libro de Mormón condena explícitamente el matrimonio plural, a menos que el Señor lo autorice con el propósito de “levantar posteridad”, en otras palabras, “multiplicarse y henchir la tierra”.
Curiosamente, no existen hijos registrados de ninguna de las relaciones polígamas de José Smith. Sospecho que Emma pudo haber tenido algo que ver con eso, comprensiblemente la poligamia era un tema bastante sensible para ella; sin embargo, otras familias sí tuvieron muchos hijos.
Yo mismo soy prueba de ello, porque mi trastatarabuelo era uno de esos polígamos, sin él yo no estaría aquí.
Una prueba de fe
Al final de todo, DyC 132 compara el matrimonio plural en diferentes ocasiones con la prueba abrahámica. ¿Recuerdan la historia de Abraham e Isaac? Dios le manda a Abraham que sacrifique a su hijo. A Abraham le costó obedecer ese mandamiento.
“¿Por qué Dios mandaría una cosa así? Eso está mal, no tiene sentido, es contradictorio”, sin embargo Abraham fue obediente. Y, afortunadamente, su prueba terminó antes de tener que matar a Isaac, pero en ocasiones eso no siempre sucederá así.
Otro ejemplo de una prueba abrahámica podría ser cuando se le ordenó a Nefi que matase a Labán. John Taylor, que practicó la poligamia, dijo que “… fue una de las cruces más grandes que jamás haya llevado ningún grupo de hombres desde la fundación del mundo”.
Helen Mar Kimball, la joven de 14 años que mencionamos antes, escribió que, según José, “la práctica de este principio sería la prueba más difícil que probaría la fe de los Santos”.
Fue una prueba de fe y es una prueba de fe.
Hay algunas cosas que las personas de fe guardan en un baúl metafórico hasta que reciben más información al respecto. No debemos ignorar estos problemas o fingir que no existen, es normal no tener todas las respuestas.
Es fácil para nosotros mirar a la poligamia, señalar con el dedo y decir, es obvio que fue algo terrible. Pero si reconocemos las experiencias de quienes vivieron en ese período, veremos un panorama diferente.
Avanza con fe
Con el tiempo, muchas mujeres escribieron libros defendiendo la poligamia. Muchos hombres y mujeres tuvieron grandes experiencias espirituales que les brindó consuelo con respecto a la práctica, incluidas visitas de ángeles, visiones y sueños.
La historia de Heber y Vilate Kimball es asombrosa.
Si aquellas personas que inicialmente sintieron un fuerte desagrado por la poligamia eventualmente pudieron obtener un testimonio de ella e incluso practicarla, entonces, por lo menos, puedo llegar a la conclusión de que todavía hay cosas que no entiendo sobre el tema, y cosas que probablemente todavía no podré entender. Así que estoy dispuesto a guardar esas preguntas hasta tener más información.
Si deseas saber más sobre este tema, visita los enlaces en la descripción. ¡Que tengas un buen día!
Recursos adicionales
5 interrogantes comunes: La poligamia, José Smith y la Iglesia