“Cuando estás al servicio del Señor, tienes derecho a recibir Su ayuda. Recuerda que a quien el Señor llama, el Señor prepara y capacita”. – Presidente Thomas S. Monson
Es común sentirnos abrumados cuando recibimos grandes responsabilidades y ¡qué gigante deber tenemos en la obra de Dios! En especial, los jóvenes para quienes es un mandamiento servir en una misión.
Puedes sentirte intimidado o creer que no tienes la capacidad de embarcarte en este llamado. Pero, recuerda, eres un hijo de Dios y Él te llamó porque sabe de lo que eres capaz. Si Dios, el creador de todo, confía en ti, ¿por qué tú no? ¡Ten presente estas cuatro cosas cuando comiences a dudar de que puedes colaborar en la obra de Dios!
Esfuérzate por obedecer fielmente

Imagen: Canva
Cuando somos fieles, hacemos todo lo posible para alinear nuestros deseos y acciones con Su voluntad.
Asimismo, demostramos humildad, que somos capaces de reconocer las impresiones del Espíritu Santo y hacer lo que Dios manda.
Enfócate en el amor

Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Los misioneros están cumpliendo con su deber y comisión cuando practican la caridad por todos.
Solo de ese modo podremos lograr tocar el corazón de las personas e invitarlas a conocer el evangelio de Cristo.
Confía en la gracia del Salvador

Imagen: Shutterstock
Tu éxito como misionero no se basa en tu nivel de perfección.
La gracia convierte tus debilidades en fortalezas, tal como lo prometió el Señor en Éter 12: 27:
“Doy a los hombres debilidad para que sean humildes; y basta mi gracia a todos los hombres que se humillan ante mí; porque si se humillan ante mí, y tienen fe en mí, entonces haré que las cosas débiles sean fuertes para ellos”.
Recuerda que el señor está contigo

Imagen: La Iglesia de Jesucristo
El Señor trabajará a tu lado, brindándote gracia en cada paso y en cada tropiezo. No temas, Él jamás te abandonará. Por el contrario, siempre estará para fortalecerte y recordarte de lo que eres capaz.
No te subestimes, porque el Señor confía en ti. ¿Qué consejo le darías a alguien que no se siente lo suficientemente bueno como para servir en una misión?
Fuente: laiglesiadejesucristosano