La mayoría de nosotros ya hemos escuchado de Carlos Wizard Martins, el emprendedor más exitoso de Brasil, misionero retornado, expresidente de misión, expresidente de estaca y, además, escritor del bestseller “Despierta el millonario que hay en ti”.
Su padre mantuvo su hogar como conductor de camiones y Carlos comenzó a estudiar el idioma inglés cuando se unió a la Iglesia de Jesucristo a los 12 años. Luego mejoró su inglés durante su tiempo como misionero y, posteriormente, en Brigham Young University.
Tiempo después fundó “Wizard Language Institute”, una cadena de más de 2600 escuelas de inglés en 10 países.
Vendió la empresa en 2013 y, desde entonces, la familia Martins se ha dedicado a construir negocios inmobiliarios, financieros, deportivos, de educación y comida rápida.
Carlos Martins y David Neelaman, fundador de las aerolíneas Morris Air, WestJet, JetBlue, y Azul, en la jornada de las Puertas Abiertas del Templo de Brasilia, Brasil en agosto de 2023. Imagen: Cortesía de Carlos Martins
Carlos, como un gran profesional, ha visto innumerables estrategias y métodos organizativos a lo largo de su carrera, pero es el ejemplo de la Iglesia a la que se unió a los 12 años lo que tanto admira. El empresario compartió:
“Creo que la Iglesia es la organización más perfecta en la faz de la Tierra. Cualquier persona que esté involucrada en algún tipo de organización, sea de educación, salud, corporativa o recreativa, se beneficiará si observan, analizan e intentan imitar la organización que la Iglesia tiene.
Mucho de lo que he realizado al pasar de los años ha sido por literalmente seguir lo que veía que la Iglesia hacía. Es fenomenal.”
Carlos Martins conversando con Humberto Martins, antiguo presidente de la Corte Federal de Justicia de Brasil, en el Templo de Brasilia, Brasil, en agosto de 2023. Imagen: Cortesía de Carlos Martins
Durante las primeras dos semanas del mes de agosto, Carlos Martins se dedicó a invitar, recibir y acompañar a diversos dignatarios y oficiales del gobierno de Brasil en la jornada de las “Puertas Abiertas” del Templo de Brasilia.
Él invitaba personalmente a cada una de las figuras importantes de dicha nación, dándoles un tour personalizado. Entre uno de los invitados estuvo el expresidente Jair Bolsonaro.
Carlos Martins con Marcos Rossi, una celebridad brasileña, y su esposa, Lucimeire Guerrero. Imagen: Cortesía de Carlos Martins
Además de estar preparado para ayudar en la jornada de Puertas Abiertas, Carlos cree firmemente que el Señor coloca a todos Sus hijos e hijas en determinados lugares y momentos para llevar a cabo Su obra. Así, él compartió uno de sus pasajes favoritos:
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá”. (Mateo 7:7-8)
Carlos Martins junto a Michelle Bolsonaro, anterior primera dama de Brasil. Imagen: Cortesía de Carlos Martins
Carlos está tan convencido de que cada persona tiene un talento o un don especial que dar, que puso a su escuela de idiomas el nombre de “Wizard” (Mago, en español), en honor al “Mago de Oz”, una película donde cada persona espera encontrar el talento único que posee. Él comparte:
“En algún momento, tienes que dedicarte a descubrir tu don”.
Algo importante a recalcar, es que Carlos atribuye su inspiración y éxito a Dios y la influencia de su esposa, Vânia.
Carlos Martins y su esposa Vânia Martins. Imagen: Cortesía de Carlos Martins
Ya sea recibiendo a dignatarios en una jornada de Puertas Abiertas en un templo, ayudando a reubicar a 20,000 refugiados como misionero de servicio o compartiendo su testimonio en Internet, Carlos se dedica a utilizar su influencia para servir a los demás y conducirlos a Cristo.
Algo que cree que trae mayor felicidad en la vida, tanto profesional como personal es lo siguiente:
“La verdadera felicidad es tener el Evangelio y su plenitud, y entender que tenemos limitaciones, pero que al Señor le importa mucho más nuestras capacidades y nuestra perspectiva eterna que nuestras limitaciones temporales.
Entendemos que somos instrumentos en las manos del Señor para hacer Su voluntad, pues esta Iglesia no es mía ni es de nadie. La Iglesia tiene un dueño, y el dueño es el Señor Jesucristo”.
*Imagen cortesía de Carlos Martins
Fuente: LDS Living
